En una sentencia de 12 de septiembre 2019 (n° 18-20.727), el Tribunal Supremo francés (Cour de cassation) ha confirmado que el arrendador que no autorizó el subalquiler tiene derecho a exigir el reembolso de los importes recibidos por sus inquilinos gracias a la página web Airbnb.

Se consideró que los subarrendamientos recibidos por los inquilinos sin autorización del arrendador constituyen frutos civiles que pertenecen por accesión al propietario. Por lo tanto, las ganancias percibidas deben serles reembolsadas.